El neoliberalismo se postula a sí mismo como un método imperfecto de vivir pero con una salvedad que a pesar de sus defectos y con todos sus problemas es el único sistema que puede hacer funcionar la sociedad.
Por favor que conste en actas que hay dos cosas inexactas en esa nueva teoría dos mentiras hay en esa afirmación:
Una es su señoría que la sociedad funcione y la otra, usted perdone, si al decirlo se me pianta un pokemón pero el neoliberalismo ni siquiera es eufemismo sino que es directamente el mas práctico sinónimo que hay de la muerte y quien lo cuente como método de vida puede que ande por Florida pero no por Argentina o Uruguay.
El neoliberalismo desde su mismo bautismo o en el útero prestado del capitalismo que lo reparió ya venia vacunado contra el hombre no rentable que si no era tan amable de morirse solo él siempre lo ayudo.
El neoliberalato tiene cuerda para rato y con ella anuda el moño del regalo de la globalización. Nuevo y último retoño de la trinidad profana que en relevo de la otra y más de mil te afanan matan y establecen su ritual de adoración con un nuevo calendario que en vez de los santos tiene las fechas de vencimiento estipuladas en la carta de intención que no explican la intención de lo que dicen porque al igual que los del otro son oscuros los designios del nuevo señor.
Este culto que se expande como un gigantesco glande en lugar de fecundar esteriliza todo lo que alrededor le sostenga la importancia a algo que no de ganancia y hasta los mas afectados por las consecuencias de la enfermedad se acostumbran a luchar por el triunfo de los que triunfan sobre ellos convirtiéndolos en terminales de un sistema que es el que se expresa cuando hablan convencidos de tener ideas propias si las tienen porque alguien se las vendió.
El neoliberalismo se libera a sí mismo de las trabas que les ponen los estados que una vez estatuyó y en las nuevas condiciones se estatuyen estatismos no estatales, son quietismos como el de la estatua de la libertad.
El neoliberalismo se contempla a sí mismo como aquel de la leyenda que se ahogó en el agua que lo reflejó pero hay una componenda la división del trabajo da que no se hunda el majo sino cualquier otro que ni figuró.
De este modo se expresaba un fiscal que presentaba en un juzgado los cargos contra la patota neoliberal pero el juez que estaba a cargo dio todo por anulado dijo que estaba implicado en el caso este mismo señor fiscal porque acababa el estado de quedar privatizado y él solo era otro cesante y si algo tenía para reclamar que llamara en adelante y en un tono más paciente al servicio de atención al cliente bien dispuesto a aguardar en línea hasta que la primera ave de rapiña disponible con suerte lo fuera a escuchar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Volás , cantás, adónde anidás?