El silencio llega... cuando uno sabe observar

El silencio de la mente llega
de forma natural, fácilmente, sin ningún esfuerzo, si uno sabe
observar, mirar. Cuando observe una nube, mírela sin la palabra y por
tanto sin el pensamiento; mírela sin la división del observador.
Entonces hay consciencia y atención en el mismo acto de mirar; no la
determinación de estar atento, sino mirar con atención; aunque ese mirar
solo dure un segundo, un minuto, eso es suficiente. No sea codicioso;
no diga "Tengo que tenerlo durante todo el día". Mirar sin el observador
significa mirar sin el espacio entre el observador y lo observado, lo
cual no quiere decir que uno se identifique con lo que está observando.
Así, cuando uno puede mirar un árbol, una nube, la luz en el agua, sin
el observador, y también -lo cual es mucho más difícil, necesita más
atención- si uno puede a mirarse a sí mismo sin la imagen, sin ninguna
conclusión, porque la imagen, la conclusión, la opinión, el juicio, la
bondad y la maldad, tienen su centro en el observador, entonces
encontrará que la mente, el cerebro, se vuelve extraordinariamente
quieto. Y esta quietud no es algo que se pueda cultivar; puede suceder,
sucede, si uno está atento, si es capaz de observar todo el tiempo;
observar sus gestos, sus palabras, sus sentimientos, los movimientos de
la cara y todo el resto.
J. Krishnamurti
Es verdad, o al menos se siente como verdad, pero no creo que sea fácil. Recuerdo de chico haber observado tanto algo que luego ese algo parecía irreal.
ResponderEliminarVamos a probar.
esa es la idea aunque tampoco
ResponderEliminarkrishmamurti es jodido
te pone a prueba
la meditacion es buena
tengo un recuerdo de este asunto
robert fripp en el goethe, clinica de guitarras, el tipo se sienta, se saca el reloj, medita ante el publico, esperando que la gente se callara y se comprenetara
el tiene un disco DISCIPLINE yo creo q es eso DISCIPLINA